En el presente post vamos a tratar de los 2 puntos claves del Childgrooming o acoso sexual a menores por internet, ya que es un tema que debido a la gravedad que tiene, preocupa mucho a los padres y por tanto es una cuestión que nos comentan éstos cuando vienen al despacho.
Los casos de acoso sexual a niños por internet o child grooming siguen creciendo en España. Las autoridades registraron en 2023 al menos 104.748 denuncias de imágenes de abuso sexual infantil en internet en España, lo que significa unas 2.000 a la semana, casi la misma cantidad que se registra en México al día, según el primer informe global realizado por el instituto Childlight de la Universidad de Edimburgo.
Según la entidad Childlight, un estudio reciente indicó que en torno a un 18% de los niños y niñas españoles fueron objeto de delitos de imagen sexual en línea no consentidos, sea porque se les tomaron imágenes, se propagaron o fueron expuestos a ellas.
¿Qué es el «childgrooming? ¿Cómo podemos saber si nuestro hijo está sufriendo acoso sexual?
El child grooming (o acoso sexual a menores) es una práctica delictiva que consiste en que un adulto contacta con un menor a través de las redes sociales y/o internet con el objetivo de ganarse poco a poco su confianza para luego inducirle u obligarle a participar en una actividad sexual.
Esta puede ser de mayor o menor gravedad, yendo desde conversaciones sobre sexo a conseguir material íntimo del menor e incluso llegar a mantener un encuentro sexual. Éste delito viene recogido en el artículo 183 ter. Del Código Penal.
La Fiscalía General del Estado ve «preocupante» la evolución de los delitos online. En especial, los que afectan a los menores y que suponen el 8,5% del total. Los procedimientos por delitos contra la libertad sexual en internet han crecido un 18,45% con respecto a 2019 pero en el caso concreto del child grooming ese incremento es del 55% en solo un año.
Aumentos de casos de Acoso sexual a menores por internet y la pornografía infantil.
El cada vez más normal uso de las nuevas tecnologías y, sobre todo, del uso de éstas por menores de edad sobre todo tras la pandemia de COVID-19 «está claramente» detrás de esta «perversa incidencia», según el documento. En éste también se recoge que existe una «creciente sensibilización» por parte de progenitores, cuidadores y tutores ante la vulnerabilidad de los menores frente a los depredadores sexuales. Y eso ha supuesto más denuncias.
No obstante, la Fiscalía reconoce obstáculos. Entre ellos, que muchos procedimientos judiciales investigan a una misma persona por acciones reiteradas en el tiempo y con un número elevado de víctimas. Eso hace que las cifras de child grooming puedan ser incluso más abultadas. Sin embargo, quedan desdibujadas por la «falta de concreción» del sistema informático de la justicia.
Otro de los aspectos a destacar que recoge la Memoria de la Fiscalía General del Estado y que contribuye a que los delitos de child grooming queden ocultos es que, con mucha frecuencia, este tipo de abuso sexual tiene como objetivo conseguir material pornográfico. Para la Fiscalía:
«Resulta especialmente preocupante la reiteración con la que se están detectando en nuestro país actos de elaboración de pornografía infantil a partir de contactos directos por vía electrónica en los que el agresor invita al o a la menor a mostrarse desnudo/a y en posiciones sexualmente explícitas o, incluso, le incita a realizar actos sobre su propio cuerpo –como introducción de objetos por vía anal o vaginal–».
Y esto, insisten los fiscales, constituye un delito de abuso sexual. Pero las denuncias por este delito no se realizan. En muchas ocasiones, explica la Fiscalía, los propios menores ni tan siquiera son conscientes de la agresión sufrida (debido en ocasiones a su muy corta edad). Además son prácticas clandestinas que pueden no salir a la luz.
La conclusión es que la ciberdelincuencia sigue creciendo en nuestro país con 16.914 procedimientos en 2019, un 28,69% más que el año anterior. Las estafas, con un 45,5% de casos, seguidos de las amenazas y coacciones (12,13%) -entre los que se incluiría el acoso escolar– y la pornografía infantil (8,98%) son los delitos online más numerosos.
¿Cómo puedo buscar un abogado por caso de acoso sexual a menores en Sevilla?
Sabemos lo complicado que es contar a un profesional éste tipo de casos y situaciones tan violentas, es por ello que tratamos este tipo de casos con la máxima profesionalidad y siempre tratando con un abogado especialista en el tema para cada caso, porque sabemos lo importante que son sobre todo el bienestar de los menores para los padres y más con situaciones tan desagradables como éstas.
